16 oct 2014

Historia del mimo






"Si está permitido representar pasiones y hechos por medio de la música, la danza, el teatro o el cine, debe estar permitido también hacerlo a través del silencio".- Ladislav Fialka


Ordenando papeles encontré mis apuntes sobre la historia del mimo, en el 2009 tuve la gran oportunidad de disfrutar aprendiendo con Nacho Otero, gran mimo y mejor persona de esas que dejan una huella imborrable. En recuerdo de él lo comparto con vosotr@s

Así como la música nos sirve para expresar los sueños, el cine, el teatro y la danza para representarlos, la pantomima nos introduce en la poesía del sueño. Primo-hermano del bailarín, la diferencia entre ambos es que el bailarín flota en el aire, mientras que el mimo permanece en el suelo.
Originario de Grecia y Roma, el mimo ha pasado por diferentes momentos de aceptación a nivel social. En Roma, durante el Imperio Romano, los mimos gozaron de uno de los estatus sociales más importantes y eran considerados personas muy importantes, gozando de privilegios que les permitían obtener grandes ganancias y beneficios, tanto a nivel social como político.
Con la caída del Imperio Romano hay un vacío extenso de tiempo, hasta los siglos XIV y XV donde fueron considerados locos. Fueron mal vistos por la monarquía, la Iglesia y las altas esferas sociales, por pasar a ser artistas callejeros que hacían burlas y sátiras contra ellos. Esto provoco que en Italia y España fueran perseguidos por la Inquisición haciendo que se refugiaran en Francia. Quizás eso haya contribuido a que este país sea una de las mayores potencias del mundo en este arte.
En el siglo XVI, con el Renacimiento,el mimo se utilizó en los intermedios de obras de más envergadura como la danza o el teatro,  agrandando aún más la duda si el mimo era parte de un arte o un arte en verdad.
A finales del siglo XIX y principios del XX, el arte del mimo resurge en Francia a través de la figura de Deburau,que lo vuelve a colocar en los grandes teatros.
El siglo XX devuelve a la pantomima la gloria que merece. El vagabundo Charlot inicia la ascensión de este arte colocándolo en el centro de atención y logrando unir al mimo con la pista de circo, a este con el teatro y al teatro con el cine.
Etienne Decroux, Jean Louis Barrault yMarcel Marceau son el camino que conduce en línea recta hacia el hechizo de la pantomima para nuestro siglo.- Nacho Otero

Como le encantaba despedirse a él...
Besos y flores

8 oct 2014

La Imperfección

En este mundo donde prima la estética, donde todo entra por el ojo, disfruto cerrando los ojos y sintiendo la belleza que me rodea porque todo es maravilloso tal y como es. Acabemos con esa presión que nos imponemos sobre todo las mujeres con la busqueda de una perfección imposible.
Leí este cuento que me gustaría compartir por su mensaje

"Había un hombre allá por el sur de las montañas que cada día tenía que recorrer largos kilómetros con sus dos vasijas de barro para transportar agua a sus seres más queridos. Él llevaba sus vasijas cargadas a hombros, una a cada lado, sostenidas por un palo que las sujetaba por los extremos. Cada día las llenaba de agua. Una de las vasijas era perfecta y la otra vasija estaba llena de grietas con lo que este hombre transportaba menos cantidad de agua de la que correspondía.
Un día la vasija con grietas le habló al hombre y le dijo:
– ¿Sabes qué? He estado pensando que debo pedirte disculpas porque todos los días me llevas a cuestas pensando en transportar cinco litros de agua cuando en realidad debido a mis grietas sólo puedes transportar menos de la mitad. Apenas dos litros llegan a su destino. Y todo por mi culpa, por ser como soy.
El hombre le contestó:
– No debes pedirme disculpas por algo que yo mismo he escogido. Podría cambiarte por otra vasija pero he aprendido una cosa. ¿Sabes qué?
-No, sinceramente no sé qué has podido aprender de mis grietas, si no sirven para nada e incluso te hacen trabajar el doble.
Entonces el hombre le explicó por qué lo hacía:
– No sé si te has fijado que el largo trayecto que realizamos cada día, justo por el lado izquierdo de mi hombro donde tú estás colocada, por el camino vas dejando agua caer, eso es cierto, pero yo, cada día que he pasado, me he encargado de dejar unas semillas. ¿Has visto cuál es el resultado? Pues bien, todo el largo camino que realizamos cada día está lleno de flores y esto hace no sólo que pueda obtener frutos para alimentarme e incluso repartirlos a los más necesitados sino que hace de este camino un lugar bello y hermoso. Así que, no me pidas disculpas y estate orgullosa de quien eres porque esto que pasa es gracias a ti.
La vasija sorprendida, se emocionó y le dijo al hombre:
– ¿Sabes? Hoy he aprendido una cosa. Y es que, en ocasiones es verdad que las dificultades pueden convertirse no sólo en oportunidades. Pero es que además de los errores o defectos que tenemos no vale la pena derramar lágrimas. Debo aceptarme tal y como soy.
El hombre muy contento, pudo disfrutar de la fragancia del camino cada día, recogió sus frutos para llevar a los más necesitados y siguió caminando con ambas vasijas hasta el fin de sus días."

(Cuento Hindú)